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La importancia de la Rehabilitación de Fachadas

La rehabilitación de fachadas es una necesidad periódica para la gran mayoría de los edificios, ya que con el paso del tiempo los edificios se van deteriorando debido principalmente a los efectos del clima y la contaminación.

Las fachadas son la piel de los edificios, una de sus partes más importantes, y por ello están expuestas a todos los factores externos que dañan la salud de las mismas.

Actualmente el parque de viviendas en Cataluña está muy envejecido.  Muchos de los edificios antiguos están deteriorándose y necesitan urgentemente una rehabilitación de su fachada. Para ello es importante contar con una empresa especialista que sepa llevar a cabo todo el proceso de forma adecuada.

Las fachadas han de estar siempre en buenas condiciones y en el caso de que sea necesario alguna intervención, es importante que se realice lo antes posible para evitar que la situación empeore.

Las comunidades de propietarios siempre tendrían que disponer de un presupuesto para poder rehabilitar la fachada, ya que ésta siempre tiene que estar en buenas condiciones, al igual que lo están el interior de las viviendas.

[bctt tweet=»Las fachadas y las cubiertas, las partes del edificio que más se rehabilitan porque son las que sufren más daños y desperfectos. » username=»»]

Tanto las fachadas como las cubiertas no sólo se rehabilitan para que sean más atractivas y dar un valor estético a las mismas,  sino también para reparar zonas deterioradas. Además hay que tener en cuenta que estos aspectos influyen en la calidad de vida de las personas que habitan en el edificio, como el aislamiento de frío, el aislamiento acústico, etc. .

Las intervenciones revalorizan considerablemente el precio de las viviendas, lo que hace que sean más atractivos a la hora de vender o alquilar.

[bctt tweet=»Para rehabilitar una fachada hay que poner especial atención en las soluciones técnicas que hagan posible un ahorro de energía.» username=»»]

El ahorro de energía  a su vez permitirá un ahorro económico en las facturas de electricidad, y también en el menor mantenimiento que requerirá posteriormente. Cuanto más aisladas estén las fachadas, mucho menor será el consumo de energía.

El porcentaje más elevado de energía que se consume es de calefacción, y para poder reducir este gasto lo ideal es que no se vaya el calor de las viviendas, cosa que se consigue mediante un adecuado aislamiento. 

Las tres zonas que se suelen rehabilitar más frecuentemente en un edificio son la fachada, las cubiertas y las escaleras.  Estas últimas para mejorar la accesibilidad de las personas o bien también para la instalación de un ascensor.

Otro de los problemas frecuentes que existen en las fachadas, debido a su deterioro, son las grietas surgidas como consecuencia, normalmente de la lluvia y el frío, así como el deterioro de las vigas que pueden poner en peligro la estabilidad del edificio y la seguridad de sus habitantes.

Por ello, es importante contar con el asesoramiento de una empresa especializada en este tipo de actuaciones, un equipo con experiencia en la rehabilitación y reforma de las fachadas de los edificios.